 Dance With The Wind by Guy Cohen |
Las cosas aunque parezcan quietas siempre se encuentran en movimiento en un mundo donde la percepción estática es una ilusión para los sentidos que dibujan la realidad que camufla la constante evolución, avance imparable lleno de matices esbozados a partir de la sucesión de acontecimientos, propiciados a través del orden natural de los sucesos que dejan entrever la belleza subyacente.
Mínimos cambios perceptibles que permiten presentir el encadenamiento de sucesos propiciados por los elementos cotidianos dotados con dinamismo para alterar lo inmutable, modificado aspecto variado sin consecuencias a simple vista reflectan las ondas que deja el desplazamiento, trasladándose por el estanque de la vida empujado por las circunstancias en un constante ciclo.
Ciclo que sorprende con instantes captados en momentos concretos que nacen de forma involuntaria al ser imposible reproducir el estado, siempre cambiante jamás vuelven a la disposición anterior, condiciones irrepetibles que pueden parecerse pero nunca ser las mismas.