Fue descubierto por Labillardière en Tasmania. Los aborígenes lo utilizaban como remedio para combatir infecciones, fiebres y resfriados, introducido en el siglo XIX en Europa, la primera referencia de su existencia en España se produjo en 1863, en Tuy (Galicia).
El árbol es resistente a la acción del fuego, así que, tras un incendio, o el ramoneo por parte de animales, es capaz de rebrotar.
Puede aguantar periodos de sequía de hasta siete meses cuando el árbol esta en desarrollo.
El aroma del eucalipto es el componente principal del aceite esencial que le otorga ese aroma tan característico es el cineol.
El aceite esencial se emplea en las confiterías.
El aceite esencial, además de ser utilizado en la elaboración de vahos, se usa de modo tópico sobre la piel para la eliminación de las infecciones cutáneas.
Es una planta con una fuerte acción antiséptica y bronceadora. Se usa para combatir las enfermedades del aparato respiratorio.
Las hojas se recolectan a medida que se necesitan, durante todo el año. Se pueden secar conservándose en un bote oscuro y hermético, o usar en fresco.