La inestabilidad de la temporalidad laboral proporciona inseguridad económica al estar expectante de la renovación del contrato para poder hacer planes de futuro sin el temor al despido, siempre en tensión ante la incertidumbre de quedarse sin trabajo como preocupación antes de irse a dormir el desasosiego perturba el sueño, oscureciendo de preocupación la sucesión de los días.
El transcurrir del tiempo se vuelve enemigo de la eventualidad laboral porque la precariedad necesita gente joven, aunque sin experiencia son más baratos y desgravan aranceles, pudiéndoles pagar sueldos menores al carecer de experiencia son el trabajador ideal para la explotación laboral junto con el inmigrante.
Las pensiones son el fruto del trabajo y la perseverancia a una vida de sacrificios llena de penurias que recompensa la dedicación laboral, un fondo que asegura la vejez del trabajador ante los contratiempos de la edad, verá amenazado la continuidad de la prestación por la falta de cotización propiciada por la temporalidad laboral en un futuro lábil.
- Temporales de por vida, parche y no solución · ELPAÍS.com: "El Gobierno da vía libre al encadenamiento de contratos, en un bandazo sobre sus objetivos de hace un año - El temor a una extinción masiva de contratos lleva a ahondar en un mercado de trabajo dual".