Los medios de comunicación han filtrado del gobierno las noticias alarmistas sobre el sistema de pensiones que pone en antecedentes a los ciudadanos, medidas dirigidas a preocupar a la población, miedo que prepara el terreno para futuras actuaciones.
Al igual que Grecia a España se le avecina un paquete de medidas duras que tendrán un gran coste social, pensadas para pagar el déficit y el dinero que se prestará a la banca, aunque el estado asegure lo contrario.
Coste pensado para devolver el dinero prestado no para salir de la crisis que aumenta la incertidumbre, dudas amparadas por países que se benefician de la actual situación disminuye la solvencia económica y las posibilidades de recuperación a corto plazo, recortando sueldos y probablemente en un futuro no muy lejano las pensiones.