Los avances tecnológicos nos ofrecen continuamente nuevas formas de violencia, delincuencia y consumismo, sin embargo además nos facilita nuevas maneras de aprovechar el potencial humano. Por medio de la creatividad y el altruismo solidario, aprendiendo a trabajar en equipo buscando nuevos caminos que hacen posible utopías.
El exoesqueleto ofrece la posibilidad a los hombres de adquirir una fuerza superior, que le da la opción de mover pesos elevados, haciendo posible realizar tareas impensables hace unos años. Convirtiendo a personas en un futuro cercano en mecanismos cibernéticos, capaces de ejecutar trabajos en circunstancias hostiles.
Otra aplicación para este dermatoesqueleto artificial, es la realización de tareas de salvamento y reconstrucción en zonas derruidas por catástrofes naturales. Y la posibilidad de rescatar a mineros u obreros sepultados, salvando numerosas vidas.