En los diferentes medios de comunicación se han producido en los últimos días accidentes que han costado la vida a varios niños, por mordeduras mortales producidas por perros de presa, animales anímicamente inestables y dotados de una gran fuerza.
La mayoría de los perros de presa por si solos no son peligrosos. El peligro de este tipo de animales es el inadecuado cuidado, que potencia su agresividad, para su utilización en peleas clandestinas. O por personas irresponsables, carentes de la madurez mental necesaria para su cuidado, que fomentan la agresividad del animal.
Para evitar el abandono y el inadecuado cuidado de los animales, tendría que ser obligatorio hacer un censo de la población canina del país, con el objeto de prevenir el mal trato.
La persona que quiera tener un perro de presa a parte de estar censado, tendría que ser instruido por un cuidador autorizado, el cual debería certificar que el animal esta en optimas condiciones para convivir con los humanos y su cuidador es el idóneo para su adopción.