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lunes, 18 de enero de 2010

Sin papeles, sin empadronamiento, sin derechos.

En nuestro país al estar en principio de Europa es el puente que une la desgracia y la pobreza con la riqueza de un país subdesarrollado, esto hace que numerosas personas crucen desde países subdesarrollados buscando una oportunidad de subsistencia.



Una vez en el país son utilizados como mano de obra barata, explotados por empresarios sin escrúpulos, los cuales se enriquecen a costa de ellos. Y a costa del gobierno, no declarando muchos de los ingresos, timando de esta forma a extranjeros y residentes que viven de forma honrada.

También es utilizada la crisis para despedir indiscriminadamente a los empleados, para después contratarlos de forma irregular, no pagando impuestos ni seguros médicos por las personas que tienen a su cargo. Abandonando a su suerte, cuando estas personas han tenido un accidente, dejándolas desamparadas sin oportunidad de cobrar una pensión o ayuda pero también sin poder volver a trabajar.

Ahora sin son excluidos laboralmente también van a pasar a dejar de ser ciudadanos, viviendo en guetos y en la marginación social por los ayuntamientos que en un principio los acogieron con los brazos abiertos, porque hacían trabajos que otras personas no desarrollaban. No dejando que se empadronen y de esta forma no cobrar las ayudas que pudieran necesitar para subsistir, porque están fuera del sistema, dejando de ser ciudadanos de esa localidad o ciudad.