El interior del tronco de un árbol tirado y muerto, pero se encuentra lleno completamente de vida en su interior, además de forma caprichosa coge multitud de formas evocando diferentes interpretaciones.
El olor a madera, la luz de sol atravesando por sus huecos así como el bosque visto a través del tronco dan una sensación infantil y mágica, que te hacen retroceder en el tiempo volviendo a recordar aquellos días entrañables e irrepetibles.
El olor a madera, la luz de sol atravesando por sus huecos así como el bosque visto a través del tronco dan una sensación infantil y mágica, que te hacen retroceder en el tiempo volviendo a recordar aquellos días entrañables e irrepetibles.