En el mundo existe un equilibrio de fuerzas entre el bien y el mal que en la actualidad se encuentran descompensadas, desequilibrio propiciado por el aumento de acontecimientos negativos ponen en marcha fuerzas oscuras, ocultas a los incrédulos se alimentan de las malas acciones y sentimientos.
Los cuentos son semillas de bondad que nutren la imaginación a través de buenas acciones, historias de hechos increíbles que rompen las barreras de los limites de lo posible, fomentando el ingenio a través de la creatividad que hace posible mejorar el mundo.
Creer en acontecimientos mágicos hace surgir todo un universo de posibilidades que se cierran a la sensatez, cortapisa que restringe las alternativas que rige la madurez, desprendiéndose de la parte infantil de la personalidad necesaria para vivir felices por siempre jamás.