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domingo, 19 de diciembre de 2010

La cotidianidad del producto

Ayudar a los demás reporta satisfacción personal pero además puede ser una campaña publicitaria, enfocada a la ilusión en una época donde el ingenio puede traer alegría a través del principio de la conservación de la energía, sustancialmente modificado para crear un eslogan: “… la ilusión no se crea ni se destruye, se intercambia.” Con este proyecto contribuye con una iniciativa pionera, pero además deja un mensaje claro a la sociedad, que Coca-Cola es una empresa solidaria y se adapta a los tiempos dando soluciones en época de crisis.

Alentando a los jóvenes por medio del deporte transmite confianza en su producto, ofreciendo un torneo donde los equipos competirán a nivel nacional, posibilitando a los nuevos talentos ser ojeados por profesionales del fútbol. 

El arte es otro medio de comunicación e Internet es la clave que aprovecha esta marca para alentar la creatividad, animando a los alumnos de los colegios a utilizar su ingenio y a los profesores para su colaboración, en dos concursos: relato corto y video relato. Con el lema “Si puedes imaginarlo puedes contarlo”. 

Utilizando la cotidianidad del producto garantiza la supervivencia del artículo, socialmente aceptado y arraigado en todas las estructuras sociales, siendo la bebida más consumida del mundo.