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viernes, 30 de abril de 2010

Estado aconfesional

En muchos países de Europa a empezado una batalla en las instituciones y gobiernos a causa del uso del “Burka” , formándose una polémica alrededor de un hecho que por si mismo es irrelevante, pero puede llegar a ser un problema si se le da una dimensión desproporcionada. Como ocurre en Francia, Bélgica y España.

El acto del uso del pañuelo islámico en Europa es un hecho de rebeldía, que pone a las instituciones en un serio aprieto, por no saber como actuar ante tal provocación.

Las personas que llegan a un país tienen que adaptarse a las nuevas costumbres y participar como ciudadanos en una sociedad moderna, donde la integración racial es el valor que se tiene que promover. Por eso el país de acogida y los extranjeros que pasan a formar parte de su ciudadanía tienen que saber ganar y perder derechos con el fin de llegar al entendimiento, no utilizando su cultura o religión como pretexto para fomentar la discordia entre sus ciudadanos.

Por eso la medida a tomar con este hecho en particular es autorizar el uso del “Burka” en lugares públicos por la libertad religiosa contemplada en la Constitución Española, pero no utilizarlo dentro de instituciones públicas, siendo los edificios gubernamentales lugares laicos donde están exentos de cualquier ideología religiosa al ser un estado aconfesional.