Un mándala que se crea durante o después de una búsqueda a través de visiones, cumple las veces de diario y también de herramienta de poder.
Comprender un mándala es llegar a conocerse a sí mismo, ya que representa el patrón primigenio de la vida.
El huevo, la célula fertilizada, el embrión, el feto, cada una de las etapas del milagro de la vida son definidas por el círculo. El patrón mandálico es visible en el corte longitudinal de un útero en el que se encuentra el feto.
Recientemente, los astrofísicos han descubierto que el universo se está expandiendo y hacia dónde y a partir de qué se ignora. Pero se sabe que la fuerza dinámica es la que opera dentro del universo creando estrellas nuevas, haciendo que los planetas, los sistemas solares las galaxias y lo grandes cúmulos de estrellas giren y roten, y que su modelo atemporal es el patrón del mándala.
Tal parecería que cada ciclo tiene un principio y un fin. Sin embargo, al observar más cerca podemos notar que un ciclo está conectado a otros ciclos, que cada uno es parte integral de ciclos mayores. Este es el patrón del mándala cuyo centro (punto) y periferia (anillo) expresan el infinito.