Salve a tí, oh cordón umbilical
cuya huella en el vientre has figurado
un redondo agujero muy arrugado
que vestigia el pecado original.
Aunque fuiste en el seno maternal
la fusión de un amor muy sublimado,
una vez que al nacer fuiste cortado
se perdió tu carácter esencial.
Si dentro de ese vientre (o sea, barriga)
tu misión fuera ser única boca,
permíteme, querido, que te diga
que al final, el ombligo al hombre evoca
eróticos placeres con su amiga...
(y además, a la amiga, vuelven loca)
ANATEMA ESTRAMBÓTICO
(Placeres que en verano o en invierno
servirán como causa del Averno)
Autor: Alberto Cienfuegos Martínez Barberá
Autor: Alberto Cienfuegos Martínez Barberá
Publicación: Versos en Revoltijo (Clave de humor).