La actual crisis económica obliga a los más pobres a pagar las malas gestiones del sector financiero con recortes de derechos, imponiendo severas medidas económicas que socavan la libertad de los ciudadanos, al no tener posibilidad de elegir y buscar alternativas a la imposición de Bruselas.
Deslegitimación de los poderes públicos del estado miembro por la imposición económica que obliga aceptar las medidas de recortes sociales al gobierno Griego, en contra de la decisión democrática de los ciudadanos, obligándoles asumirse en la indigencia para saciar el hambre de la empresa política de la Unión Europea.
Es momento de reflexionar y tomar decisiones importantes que no giren solamente entorno de los intereses económicos, cambio de políticas que busquen hacer un mundo mejor, adoptando medidas que no traten a los países como generadores de dinero sino fuente de riqueza humana.
Es anticonstitucional que se le dé aún país el ultimátum para abandonar Europa por no aceptar la imposición económica con la que no están de acuerdo, el actual sistema es injusto y no respeta la democracia soberana de las naciones, además incumple con la moralidad en el que se sustenta la unión democrática de estados "Unión Europea".