El concierto en directo de Celtas Cortos en las fiestas de Piedras blancas estuvo plagado de mucho humor en una noche donde el grupo vallisoletano animo un auditorio frío al principio que fue creciéndose con cada canción, publico intergeneracional que vibro con el desparpajo del vocalista que lleno de vitalidad contagiaba de energía a los espectadores, marcando el compás del conjunto.
Directo de calidad que no perdió frescura amenizado por la espontaneidad hizo disfrutar desde el primer momento del espectáculo, plagado de actuaciones individuales con las que enfatiza la diversidad instrumental utilizada en el concierto, colorea el repertorio musical con gran elenco de ritmos.
El colofón de la interpretación hizo alusión al sentir de la tierra y utilizó la alegoría de la manzana para describir el corazón mientras en el escenario se escanciaba sidra, brindis que hacía cada uno de los miembros del grupo en homenaje a los espectadores, encantados por el broche final de una actuación inolvidable.