Los cuentos eran narraciones orales que se utilizaban a modo de fábulas para enseñar a los más pequeños los peligros a los que estaban expuestos, infundir valores o transmitir el legado cultural, edulcorando la realidad. Nutriendo la imaginación y la fantasía propia de la infancia.
Historias que evocan recuerdos de la niñez y hacen del mundo un lugar mágico, donde los sueños son más importantes que la realidad, alimentando el ingenio que después moverá la sociedad. Haciendo que los limites no existan, impulsando la rotación existencial de la mente humana.
Son fuente de inspiración y de éxito, para aquellos que con mimo utilizan este género literario respetando su esencia cuidadosamente legada, actualizando el mensaje que en su interior se esconde para que las nuevas generaciones lo interioricen convirtiéndose en parte del alma.