El presidente del Congreso efectuó un discurso elocuente, unificador y positivo al conjunto de la sociedad española, haciendo hincapié en las cuestiones que ensalzaron a España en el mundo. Aportando un idioma, literatura y tolerancia.
José Bono recalcó el valor del Rey tanto en el marco actual de la historia como en actuaciones pretéritas, comparando sus actuaciones con monarcas anteriores al señalar lo esencial de su aportación a las crónicas de España, sirviendo como nexo de transición en un tiempo convulso.
Don Juan Carlos de forma sutil, recuerda los grandes logros conseguidos en Cádiz hace dos cientos años, transmitiendo a la sociedad los valores que se promovieron y la gran conmoción que supuso en la época, rejuveneciendo aquellos valores un poco olvidados en la actualidad.