La prospección sísmica es el método que consiste en mapear el fondo para cartografiar los yacimientos geológicos en busca de hidrocarburos, utilizando ondas sísmicas que se propagan por el interior de la tierra mostrando con su refracción la ubicación del petróleo.
Estos sistemas utilizan ultrasonidos que se propagan por el agua por medio de ondas acústicas, que influyen en la ecolocación de las ballenas, desorientándolas. Esto impide a los cetáceos alejarse de la costa que acaban varadas en las playas.
Este tipo de ruidos influye en toda la fauna marina, mermando seriamente la zona donde se ejecutan las prospecciones y alterando las rutas migratorias de los peces, dibujando una imagen completamente diferente.
En la prensa y televisión se están alarmando de la existencia en la actualidad de ballenas que mueren varadas en las playas, esto suscita preguntas en la población mundial, que se ocultan a la opinión pública al existir intereses económicos.