Son muchas las versiones que circulan sobre el origen de la pasta pero todo parece indicar que su aparición se produce en China siglos antes de Jesucristo, aunque los primeros testimonios escritos no constaban hasta principios de nuestra era en libros de cocina china. Según el autor napolitano Alberto Consiglio, la pasta pasaría luego de Persia a la cocina árabe y, a través de Sicilia, penetró en todo el Occidente cristiano, arraigando profundamente en las tierras mediterráneas.
Fueron también los árabes quienes introdujeron la pasta en la península ibérica, siendo el término más antiguo que se conoce la palabra "aletría" murcianismo que significa "fideo", proveniente del mozárabe y que se encuentra en un manuscrito hispanoárabe del siglo XII, aunque anteriormente había aparecido en los textos de Arnau de Villanova. La palabra "fideo" proviene del castellano "fidear", procedente del árabe, y que significa "crecer, sobrepasar un molde", haciendo referencia a la característica de la pasta de aumentar su tamaño con la cocción.