El año viejo se esta terminando y es hora de hacer balance de nuestra vida durante todo este tiempo, que aunque no es mucho pero si es significativo para marcar una etapa importante, que junto con el resto de etapas dibujamos lo que ha sido nuestra vida.
Cada segundo que vivimos es maravilloso y aprovechable, no se tiene que desperdiciar en lamentarse de lo que podía haber realizado sino que hay que hacerlo, porque sino nuestra vida jamás estará completa siempre nos faltara algo.
Tampoco hay que dejar que nada ni nadie nos quite los sueños y las ilusiones, tenemos que luchar por que se cumplan porque sino siempre nos encontraremos a medias, estar completo es muy importante así como sentirse realizado/a. Es un momento de cambio, de coger y dar un nuevo rumbo para evitar el año pasado o si por lo contrario fue bueno para seguir por ahí porque tenemos derecho a ser feliz.
Espero que todos tengáis las esperanzas renovadas y que el año que se acerca nos traiga aquellas cosas que deseamos pero que por el contrario no tenemos.