Páginas

martes, 14 de agosto de 2012

Las fronteras psicológicas limitan el mapa político de Europa

La actual situación de incertidumbre augura lo peor para Europa en un contexto complicado alimentado por las desconfianzas suscitadas por algunos países de la zona euro, recelos que no buscan soluciones al problema sino que aumentan las fricciones en una lucha interna por la hegemonía política, encrudecida por los actuales acontecimientos económicos.

Los problemas económicos tienen un trasfondo político que impide la unidad de criterios y eleva las fricciones entre estados, increpación excusada en el déficit que tiene como objeto recortar el gasto, aumentado por la prima de riesgo que encarece la financiación de algunos países mientras a otros le sale gratis.

Es hora de ser solidarios pero no solo con aportes económicos sino con voluntad política y unidad ciudadana, mentalidad que se tiene que cultivar desde los estados para que todos se sientan hermanos, eliminando las barreras psicológicas que todavía limitan el mapa político de Europa.